Dentro de las tecnologías empleadas
por la agricultura −sea
esta convencional, orgánica u
otra− se reconocen como importantes
aquellas basadas en la
actividad o presencia de los organismos
vivos o sus derivados. De
este modo, las tecnologías bioló-
gicas empleadas en la agricultura
se conocen como “biotecnología
agrícola” o “agrobiotecnología”,
términos que hacen referencia a un
conjunto de diversas técnicas (conjunto
de procedimientos y recursos)
que pueden ser usadas para
contribuir a la solución de algunos
de los problemas agrícolas.
Las variadas técnicas de la
agrobiotecnología se fundamentan
en ciencias biológicas tales como la genética, la fisiología, la
microbiología, la bioquímica y
la biología celular y molecular.
Además, se relacionan con otras
disciplinas (ingeniería química,
de bioprocesos, informática, estadística,
economía, entre otros).
Aunque algunas de las técnicas
biotecnológicas se utilizan desde
épocas milenarias con diversos
fines (como en la elaboración de
alimentos y bebidas), desde hace
poco más de cuatro décadas, en
la agricultura se han introducido
técnicas caracterizadas por su
especificidad, precisión, rapidez y
versatilidad, que claramente han
superado o potenciado algunos
de los procesos naturales propios
de los organismos vivos. Aunque
hay muchas técnicas, a continuación
se describen brevemente solo
algunas de ellas:
La hibridación es un proceso
que consiste en cruzar diferentes
progenitores de variedades
vegetales (o razas animales)
para aprovechar las características
parentales y generar un
cultivo con características nuevas
o mejoradas que cumpla
con las condiciones de distinción,
homogeneidad y estabilidad
exigidas para una nueva
variedad vegetal. La utilización
de esta técnica en la agricultura
ha sido responsable
de los notables incrementos
de productividad de los cultivos
(maíz principalmente)
obtenidos desde las primeras
décadas del siglo XX y sigue
siendo de gran impacto en la
actualidad.
El cultivo in vitro de células y
tejidos, que incluye múltiples
técnicas y procedimientos, se
basa en el hecho de que un
fragmento de una planta (células,
tejidos u órganos) se puede cultivar en condiciones de
asepsia en un medio (sustrato)
artificial, sólido o líquido, de
composición química particular
y se mantiene en condiciones
medioambientales controladas.
En la práctica, todos los
cultivos de interés comercial
han sido objeto de estudio del
cultivo in vitro, la mayoría de
ellos con propósitos de multiplicación
o propagación masiva
de plantas élite, eliminación
de patógenos en los materiales
de siembra, generación de haploides
o con fines de conservación
(rescate de embriones,
crioconservación, entre otros).
Esta biotecnología es de uso
rutinario y, como resultado
de su aplicación, desde hace
varias décadas existen notables
extensiones de “cultivos
biotecnológicos” de banano,
caña de azúcar, palma de aceite,
frutales, flores, forestales y
otros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario